septiembre 16, 2021

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El huracán Cristina

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En una crisis institucional, cuya salida es aún incierta, se transformó el descalabro del oficialismo argentino en las primarias del domingo pasado para la elección parlamentaria de noviembre próximo, en que se renovará la Cámara de Diputados y una parte del Senado.
El Kirchnerismo, la fracción más de izquierda del gobernante peronismo, tiró del mantel al renunciar los ministros y otros funcionarios de alto rango, que responden a la conducción de la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner.
La ex mandataria, quien gobernó dos períodos, impartió las órdenes a sus subordinados –se comenta en los círculos políticos- para advertir al Presidente, Alberto Fernández, que son necesarios cambios urgentes en el gabinete para intentar revertir los resultados del domingo pasado, en que se eligieron las listas para las elecciones parlamentarias de noviembre.
La lista de dimisionarios –en estricto rigor pusieron sus cargos a disposición del Jefe de Estado- la encabezó el ministro del Interior, Wado de Pedro, perteneciente a La Cámpora, el grupo más a la izquierda del peronismo, cuyo líder es el hijo de Cristina, Máximo Kirchner.
Hasta hoy, Alberto Fernández resistía la presión del Kirchnerismo –“no voy a decidir nada bajo presión”, dijo- y mantenía a sus alfiles más leales, el jefe de gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro de Economía, Martín Guzmán.
En un intento por bajar la olla a presión, Cristina Fernández llamó a Guzmán y lo tranquilizó al señalarle que ella no había pedido su renuncia.
La figura de Guzmán es clave en estos días en que Argentina intenta cerrar un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para negociar su abultada deuda externa.
El gobierno argentino pagó las consecuencias de un mal manejo de la pandemia, reflejado en las más de 110.000 muertes, vacunas inyectadas a funcionarios y amigos del gobierno antes de la fecha que les correspondía y la implantación de una cuarentena excesiva, que golpeó fuertemente a una ya maltrecha economía.
De acuerdo a las cifras oficiales de las primarias, el Frente de Todos (denominación de la coalición de gobierno) consiguió 4 millones de votos menos que en las primarias de 2019, cuando se votó la fórmula presidencial Fernández-Fernández.
En contraste, la coalición opositora Juntos por el Cambio, que tiene entre sus líderes al ex Presidente Mauricio Macri, obtuvo la victoria en 16 de las 24 provincias del país, mientras que el Frente de Todos sólo se impuso en 6. De las 8 provincias que eligen senadores nacionales, 6 fueron para la oposición y sólo 2 para el oficialismo.

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